La Guardia de Finanzas (policía económica) de Italia ejecutó este martes un embargo preventivo de 121 millones de euros a la filial italiana de Amazon por presunto fraude fiscal en la subcontrata de trabajadores a otras sociedades, informó la Fiscalía de Milán.
La policía fiscal italiana ha confiscado aproximadamente 121 millones de euros (131 millones de dólares) de Amazon Italia Transport, una unidad de servicios logísticos del gigante del comercio electrónico, como parte de una investigación en curso por presunto fraude fiscal y prácticas laborales ilegales.
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La investigación se centra en los ‘manpower pools’, un supuesto sistema mediante el cual las grandes sociedades “se garantizan precios muy competitivos” en el mercado subcontratando mano de obra barata a empresas que contratan formalmente a los trabajadores, pero que no pagan seguridad social, IVA y otros impuestos. Según la Fiscalía de Milán, este sistema permitió a la unidad de Amazon mantener los precios de sus servicios competitivos en el mercado italiano.
En un detallado auto de 94 páginas, la Fiscalía acusa a Amazon Italia Transport de eludir las leyes laborales y fiscales, utilizando cooperativas o sociedades de responsabilidad limitada para contratar trabajadores, evadiendo así las obligaciones fiscales del IVA y reduciendo los aportes a la seguridad social. Los investigadores han reconstruido la “cadena de mano de obra” y constataron que las relaciones laborales con la sociedad que contrataba a los trabajadores se realizaban a través de “’empresas filtro’ que a su vez se beneficiaban de sociedades depósito que sistemáticamente omitieron el pago del IVA”, así como otros impuestos.
El gigante del comercio en línea utilizaba este método no solo para sus trabajadores del área logística, sino también para vigilantes de seguridad y transportistas, según medios locales.
Amazon ha respondido afirmando que cumple con todas las normativas vigentes. “Respetamos todas las leyes y reglamentos aplicables en los lugares donde operamos, y exigimos lo mismo a las empresas que colaboran con nosotros. Continuaremos colaborando con las autoridades competentes en sus investigaciones”, aseguró la empresa en un comunicado.
Durante este martes se llevaron a cabo registros en las provincias de Milán y Turín con respecto a las personas físicas y jurídicas involucradas en una investigación que se encuentra aún en su fase preliminar. En investigaciones anteriores, se logró devolver a las arcas públicas italianas 600 millones de euros en impuestos evadidos por parte de 15 empresas, que además se vieron obligadas a contratar a esos empleados y hacerse cargo de sus sueldos, según las mismas fuentes.
Otras grandes empresas han sido objeto de investigaciones similares en los últimos años, incluyendo los grupos de reparto DHL y UPS, la empresa alemana de logística DB Schenker y la cadena italiana de supermercados Esselunga, según los fiscales.
Este es el último golpe a Amazon, ya que en abril de este año, la Autoridad italiana garante de la competencia multó al grupo con 10 millones de euros al comprobar que en una amplia selección de productos estaba preestablecida la opción “compra periódica” en lugar de “compra única”, limitando así la libertad de elección de los consumidores.
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